jueves, 20 de diciembre de 2012

Biocosmética: cuida tu piel con productos ecológicos.

La Biocosmética cuenta con más adeptos cada día. Alemania, Francia e Italia son paises con gran tradición en este sector, que en la actualidad está experimentando un gran auge en España y Latinoamérica.

  Principales diferencias entre la cosmética natural y la biológica 

 La cosmética natural es aquella que en su mayor parte consta de ingredientes de origen vegetal, pero en ocasiones pueden ir acompañados de otras sustancias de síntesis como parabenes, parafinas o conservantes. La cosmética "bio" o ecológica, ambos términos son sinónimos, se elabora con activos vegetales en cuyos cultivos no se han utilizado pesticidas ni abonos químicos y no han sido testados en animales.
Carecen de colorantes, conservantes, perfumes sintéticos ni sustancias de origen animal, a excepción de la cera de abeja y la lanolina. Además, como característica fundamental, un 95% de su composición debe de ser de origen natural.

Certificación de calidad de la cosmética biológica

 Para que un cosmético pueda ser considerado "bio" debe de estar certificado por un organismo que lo acredite. En la actualidad existen varios sellos que garantizan unos estándares de calidad altos y que velan por la autenticidad del producto de cara al consumidor. De entre lo sellos más importantes en certificación biológica destacan: Ecocert, organización francesa que además se ha expandido a otros productos de consumo, BDIH, Soil Association, USDA y Natrue, este último muy exigente y estricto con las sustancias auxiliares. La ausencia de una legislación específica y de una regulación clara y definitiva por parte de los organismos públicos a nivel internacional, hace que nos encontremos en la actualidad en una especie de confrontación entre los diferentes sellos certificadores que en base a determinados intereses económicos pueden fomentar desconfianza y confusión en el consumidor. Parece por tanto necesario que desde la administración se adopte una certificación que unifique criterios y que proteja tanto a consumidores como a productores, en un mercado con gran proyección y fuerte crecimiento en años venideros.

 La biocosmética aguanta la crisis  económica

 Actualmente nos encontramos con una reafirmación de lo natural o verde. Cada día se aprecia más un compromiso ético y ecológico con el planeta por parte de los que habitamos en él y la cosmética no es ajena a este proceso. Según Organic Monitor, empresa inglesa de estudios de mercado especializada en cosmética verde, en 2008 las ventas de este tipo de productos supuso el 2% del mercado mundial de cosméticos. Además, las ventas de cosméticos ecológicos continúan creciendo a un ritmo por encima del 10% anual y, a pesar de la crisis, es uno de los sectores que mejor se está comportando en nuestro país.

 Weleda y la agricultura biodinámica

 El cultivo biodinámico supone una ampliación del ecológico. Al igual que este último, no utiliza pesticidas, ni fertilizantes, ni semillas transgénicas y evita la sobreexplotación de la tierra.Una característica de la agricultura biodinámica es que está en armonía con las fuerzas de la naturaleza. De esta manera, se tienen en cuenta las fases lunares a la hora de sembrar, recolectar, etc. para conseguir unos ingredientes de la máxima calidad. La firma Weleda poseé en Alemania el huerto más grande de Europa de estas características, con más de 20 hectáreas de extensión cultivable. Además, esta empresa ejecuta proyectos de comercio justo, otra de las características de la cosmética "bio".

miércoles, 21 de marzo de 2012

Cosmética natural y biológica: ¿son lo mismo?

En los últimos años, la venta de productos cosméticos naturales ha ido incrementándose progresivamente. Sin embargo, pocos consumidores conocen las diferencias entre la cosmética natural y la biológica.

Principales diferencias entre cosmética biológica y natural


La cosmética natural no tiene porque ser biológica, mientras que la biológica siempre será natural. Este es el principal axioma que tenemos que tener en cuenta para diferenciar ambos tipos de cosmética verde.
La cosmética natural es aquella en la que la mayoría de sus ingredientes son de origen vegetal, pero en ocasiones van acompañados de sustancias de síntesis como parafinas, parabenes o conservantes.
Por el contrario, la cosmética "bio" tiene como premisa la utilización de productos vegetales cultivados sin pesticidas ni abonos químicos. Además, en su composición no existen conservantes, ni colorantes, ni ningún tipo de pérfume sintético.
Otra característica fundamental de la cosmética biológica es la absoluta prohibición de contar entre sus ingredientes con sustancias de origen animal, a excepción de algunos productos que pueden contener lanolina o cera de abeja. Al igual que los cosméticos naturales, los productos nunca son testados en animales.
Por último, los cosméticos biológicos deben tener en su composición al menos un 95% de sustancias de origen natural, para que puedan obtener la certificación de calidad correspondiente.

Sellos de calidad en la cosmética natural y "bio"

Actualmente no existe una legislación oficial específica, a nivel internacional, que regule definitivamente el sector. Esta ausencia hace que las firmas tengan que recurrir a empresas privadas que certifiquen la calidad y autenticidad de sus productos, existiendo una diversidad de sellos que realizan esta función.
De entre los más importantes y reconocidos por su fiabilidad destacan: Eccocert, organización francesa que aglutina otros productos aparte de los cosméticos y presente en más de 85 países, USDA en Estados Unidos, la alemana BDIH y la británica Soil Association. En España, el sello francés Cosmebio es uno de los más utilizados por las firmas de cosmética biológica.
Mención especial precisa Natrue, creado en el año 2007, sello muy estricto y exigente con la utilización de sustancias auxiliares y que certifica a la firma Weleda.
Sería altamente recomendable que las autoridades regularan de una vez por todas la certificación de calidad de los productos de cosmética natural y biológica, con el fin de proteger al consumidor y evitar "guerras" entre los distintos sellos de calidad que no favorecen en nada la expansión del sector.

La biocosmética tiene cada día más adeptos. Su apuesta por productos ecológicos, sostenibles con el medio ambiente y, a la vez, de comprobada eficacia en el cuidado de la piel está siendo un éxito, creciendo al ritmo de un 15% anual en ventas y compitiendo con las firmas de cosmética tradicional, a las que, en muchos casos, no les está quedando más remedio que implementar en sus catálogos líneas de productos cada vez más naturales para no perder cuota de mercado.

lunes, 12 de marzo de 2012

   Cosmética natural para el hombre


Las firmas de cosmética natural y biológica están cada vez más interesadas en atraer la atención del segmento masculino de la población. Prueba de ello es el lanzamiento de diversas líneas para el cuidado de la piel del hombre.


Cuidado del rostro masculino

La piel del rostro del hombre se caracteriza por ser mucho más gruesa que la de la mujer. De esta manera presenta un nivel de resistencia bastante elevado frente a las agresiones externas como el sol, el frío o el viento. Pero con el transcurrir de los años, la aparición de arrugas, manchas cutáneas y líneas de expresión se presenta, en ocasiones, de manera brusca y repentina. A este inconveniente se le suma la agresión que diariamente sufrimos los varones: el afeitado.
La tarea de afeitarse constituye el mejor "peeling" que pueda existir. La eliminación de células muertas que supone pasar la cuchilla sobre el rostro es altamente beneficiosa para la piel, pero exige un cuidado extraordinario en base a productos que alivien la irritación producida y mantengan el rostro suave e hidratado.

Cosmética bio para el afeitado


La firma de cosmética natural y bio Weleda, una de las más reconocidas a nivel mundial, ha desarrollado recientemente una línea específica para el cuidado masculino con productos 100% biológicos, sin colorantes sintéticos, sin parabenes, y sin ningún componente de origen petroquímico.  Esta línea facial para hombres se compone de una crema para el afeitado manual a base de ingredientes como leche de cabra, leche de almendra y extractos de pensamiento silvestre biológico, que ablanda la barba y favorece un rasurado suave y apurado.
Además de esta crema, Weleda presenta una loción que se puede aplicar antes o después del afeitado. En el primero de los casos ayuda a levantar la barba, favoreciendo el corte de la cuchilla, mientras que sí lo utilizamos de manera posterior conseguiremos una enorme sensación de frescor, desinfectando, además, posibles pequeñas heridas.
Por último, el bálsamo para el afeitado actúa como calmante e hidratante, aportando una agradable sensación de efecto frío, gracias al aloe vera que contiene, mientras que el aceite de jojoba biológico protege la piel del desecamiento.
Es un hecho, el cuidado de la piel por parte de los varones sigue en constante aumento y, tal vez, sea la cosmética natural y biológica la más indicada para facilitar la labor, mediante productos nada agresivos y sostenibles con el medio ambiente.